Arquitectura Paisajista: Espacios Exteriores en Guimaraes

El proyecto nació de la necesidad de añadir 12.000 m2 de terreno compuesto de un bosque de robles en un estado razonable, a las viviendas existentes en 4000 m2 de terreno, separados hasta ahora por una escalera pública de 4 m de ancho.

Se crea un nuevo acceso de baja altura desde la carretera, que se convertiría eventualmente en la entrada de la casa principal, eliminando el acceso existente hecho sobre el nivel de suelo, 24 m de altura.

Es importante tratarlo como un curso de carácter recreativo que atraviesa una gran parte de la tierra, vinculados entre sí con caminos peatonales y que se benefician por la primavera, convirtiendo el agua en uno de los elementos estructurales del jardín.

Finalmente el resultado del proyecto es a partir de una motivación funcional y estructural. Los conceptos que definen son – la idea, la estructura y la forma. El paisaje y la arquitectura se fusionan para ser considerados como lo mismo.

Se proyectan muros, taludes y rampas; las vías se insertan en un orden jerárquico, las aguas se dirigen al nuevo lago. La regeneración del paisaje se propone a través de la constitución de un sistema integrado en donde plantas de cama se entremezclan con el paisaje.

Materiales, especies, texturas y colores notables se combinan por una inspiración abstracta, en una zona donde las relaciones entre lo natural y lo artificial se exploran. Para finalizar, se espera de esto un lugar que establezca la empatía de comunicación con los sentidos.