En una casa del barrio de Palermo, estos 90m2 de terraza impactan por el logrado equilibrio entre sofisticación y audacia.
La terraza y el quincho en toda su amplitud y vista del interior de la casa, iluminado por la luz que ingresa del plano de vidrio ubicado en la terraza.
El quincho, un proyecto del estudio Niu arquitectura, de la arquitecta Nurit Finkelstein y el ingeniero Juan Frutos, fue construido en el lugar donde antes estaba el lavadero de la casa. Para fusionarlo con el exterior, se eligieron aberturas corredizas de BK Aluminio, que pueden abrirse casi en su totalidad.
Los nichos en la medianera aportan movimiento al espacio y permiten colocar en alto las plantas con cañas de bambú, que aumentan la intimidad.
Como si fuera un espejo de agua, el plano de vidrio aporta color, continuidad espacial y un mayor ingreso de luz al interior de la casa.
El piso, al igual que el quincho, se revistió con cemento alisado. El espacio del quincho se iluminó con dos lámparas colgantes en vidrio y hierro y spots embutidos AR111.
La terraza y el quincho en toda su amplitud y vista del interior de la casa, iluminado por la luz que ingresa del plano de vidrio ubicado en la terraza.
El quincho, un proyecto del estudio Niu arquitectura, de la arquitecta Nurit Finkelstein y el ingeniero Juan Frutos, fue construido en el lugar donde antes estaba el lavadero de la casa. Para fusionarlo con el exterior, se eligieron aberturas corredizas de BK Aluminio, que pueden abrirse casi en su totalidad.
Al aire libre, el deck de madera de lapacho se elevó para poder colocar un plano transitable de vidrio laminado esmerilado. Contra la balaustrada que da hacia la calle, se dispusieron papiros del Nilo y Penisetum rubra y, para equilibrar el volumen que pierden en invierno, se intercalaron gruesas cañas de bambú secas.
Los nichos en la medianera aportan movimiento al espacio y permiten colocar en alto las plantas con cañas de bambú, que aumentan la intimidad.
Enfrente, el efecto teatral provocado por la iluminación realizada con pinchos entre las plantas y los spots embutidos en el piso, acompañada por dos faroles de ratán blanco. Sobre el piso del deck, almohadones cuadrados, a tono con el panel de vidrio. A un costado del quincho, el estudio Niu creó un espacio de relax que fue ambientado con reposeras tijera, una manta de lana, almohadones de Indonesia y una bandeja de cerámica y ratán con un juego de té.
Como si fuera un espejo de agua, el plano de vidrio aporta color, continuidad espacial y un mayor ingreso de luz al interior de la casa.
El piso, al igual que el quincho, se revistió con cemento alisado. El espacio del quincho se iluminó con dos lámparas colgantes en vidrio y hierro y spots embutidos AR111.
A la parrilla de gran tamaño –el dueño de casa es un gran amante de los asados– se le diseñó una tapa de chapa que permite cerrarla para que quede oculta cuando no se usa.
Sobre la mesa de lapacho, acompañada por cuatro bancos, platos ‘Folk’ de cerámica, bol, vasos ‘Delivery Trash’ de cerámica, bol de cerámica marroquí azul y candelabro.
Sobre la mesa de lapacho, acompañada por cuatro bancos, platos ‘Folk’ de cerámica, bol, vasos ‘Delivery Trash’ de cerámica, bol de cerámica marroquí azul y candelabro.
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