Esta casa en Japón intenta plantear una nueva relación entre el interior y el exterior a través de dos volúmenes y un patio central. Por la irregularidad del terreno, las formas de los recintos en los dos cubos que forman la “casa interior” y la “casa exterior”, también son irregulares y responden a distintas funciones.
Entre ellos configuran un interior ambiguo, muy abierto y luminoso, interior y exterior al mismo tiempo. En los dos volúmenes hay ventanas de madera en sus perímetros, dejando pasar la luz y el viento entre ellos.
La puerta de acceso está dispuesta de tal manera de generar una vista de lado a lado, desde el jardín norte al jardín sur. Otras ventanas van apareciendo para generar vistas inesperadas desde el patio.
En la “casa interior” se incorporaron las habitaciones, donde una familia de cuatro personas puede vivir con comodidad, equipada con una sala de estar, comedor, cocina, tres habitaciones y baños.
La “casa exterior” genera espacios que responden a funciones exclusivamente exteriores: carpintería, jardinería, bodega de bicicletas, hamacas, terraza para tomar sol, mirador, lugar para una siesta o leer un libro.
Takeshi Hosaka pensó que con esta idea de un interior-exterior se podía generar una mayor riqueza para los actos de la vida cotidiana; un contacto directo con las “cosas” de la naturaleza, la lluvia, la tierra, insectos y aves. Según él, éstas fueron eliminadas por las “arquitecturas modernas” de las ciudades, en las que se separó completamente la vida exterior de lo cotidiano.
Arquitectos: Takeshi Hosaka Architects
Año de la Obra:2009
Área construida:37.32 m²
Área del terreno:95.98 m²
Ubicación: Tokio, Japón
Fotógrafo: Masao Nishikawa
Comentarios
Publicar un comentario